martes, 12 de octubre de 2010
Mandrill
Llegó harto tarde, pero en fin para que no se la pierdan en DVD; mi crítica de Mandrill la última película de Ernesto Díaz.
miércoles, 6 de octubre de 2010
Murakami
Que le den el Nobel a Murakami
PORQUE la literatura también puede ser una droga
PORQUE tenemos derecho a tener imaginación; es más si queremos nos la fumamos, jalamos, duluimos o quemamos
PORQUE es posible revolcarse en la mierda y lanzarse al abismo de manera elegante
PORQUE en el fondo todos sabemos que Fitzgerald es mejor que Hemingway
PORQUE invento a Midori (Tokyo Blues: Norwegian Wood)
PORQUE inventó el parasexo (vease Malta Kano y Toru en "La crónica del pajaro....")
PORQUE escribe buenas escenas de sexo
PORQUE a veces nos gusta un folletín bien escrito
PORQUE la literatura le debe mucho a David Lynch
PORQUE escribió tres veces la misma novela, a pesar
de que a la primera le había resultado
PORQUE no le tiene miedo a repetirse
PORQUE queremos tener pronto en las manos 1Q82
PORQUE su prosa hipnotica engendra lectores
PORQUE es japonés, escribe como Fitzgerald y usó una canción de los Beatles para títular una de sus novelas.
sábado, 2 de octubre de 2010
Estrellas Muertas
De vuelta en Indie.cl con la nueva novela de Álvaro Bisama. La verdad es que con Daniel lo entrevistamos, pero tuvimos que delegar la transcripción lo que causo problemas y al final impidió que saliera en esta pasada. Pero esperamos ampliar esa entrevista próximamente y ahí tirarla de la mano de nuestro nuevo proyecto.
jueves, 30 de septiembre de 2010
Hong - Kong según Wong Kar - Wai
Vía Twitter pillé un artículo de Letras Libres sobre Hong Kong capturado por la lente del maestro.
La isla de Wong Kar-wai vive en un limbo entre la ensoñación y la realidad. Se trata de un lugar de colores saturados, luces eléctricas y horizontes borrosos. Ese Hong Kong es una ciudad donde las nubes se mueven a un ritmo acelerado, y donde las personas parecen flotar. Es una ciudad donde los barrios bajos no están peleados con la elegancia y la sensualidad. Nunca una pared sucia y despintada se había visto tan sexy como cada vez que Maggie Cheung va a comprar fideos en In the Mood for Love (2000). La actriz camina al ritmo de un waltz, pasa la mano por la pared y baja los escalones lentamente mientras su figura estilizada aparece y desaparece entre las sombras.
viernes, 17 de septiembre de 2010
Carriers
En medio de ese choque de fuerzas, decides poner tu cabeza en suspensión por un par de horas, por eso te gusta ir al cine de manera intempestiva, para quebrar el tiempo y la realidad en el instante en que esta apunto de pasar todo y nada al mismo tiempo. Lo sorprendente es la cantidad de sincronias que puedes establecer entre tu hipersensibilidad y un film. Quien hace la película es quien la ve, quien la fagocita y la mezcla con sus recuerdos, enganchando sensaciones e imagenes que serán y que fuerón a un film que quizás no tiene nada que ver con esa maraña de pensamientos. Una Isla desierta rodeada de barcos fantasmas a la deriva, que constituyen un terreno nuevo en tu geografía personal. En esta oportunidad el film se conecta escandalosamente con tus sentimientos, no es que te veas reflejado en la pantalla, sino que es más profundo, son las emociones y los sentimientos desprovistos de cualquier máscara lo que se pasean por la pantalla, los identificas y los desnudas en tu cabeza porque lo más impresionante es el disfraz. Hay más verdades en una buena película de terror que en un biopic, los sentimientos son mas verdaderos en una película de género que en un documental, porque los géneros y las subespecies cinematograficas, asumen su derrota y parten del delirio. Porque a veces en eso se convierten ciertas emociones y sentimientos que no puedes poner en palabras; en delirios y sueños afiebrados, en imagenes sueltas y deseos dispersos que no puedes hacer salir a flote.
Carriers parece ser el debut anglo de los hermanos David y Alex Pastor, tipos a tener en cuenta que se despacharon una película donde lo que menos importa es la sangre y el gore, donde no interesa el miedo, lo que esta por encima de eso, son las cadenas invisibles que nos atan unos con otros y que a veces se quiebran fácilmente. Un par de hermanos con un par de chicas viajan en un auto con un par de tablas de surf, directo a un paraiso idilico donde los hermanos pasaban el verano entre las olas y el pan con jaiva. El mundo se fue a la mierda, porque un virus acaba con la gente, te vuelve algo putrefacto apenas te toca, te roza o lo respiras. Y cuando alguien es contagiado tienes que alejarte de él irremisiblemente. El virus no tan sólo destruye tu cuerpo sino que hace estallar la red de emociones que unen a los personajes, el virus saca lo peor de nosotros, pero a escala humana. Nada de canibalismos ni retrocesos al pleistoceno, la verdadera tragedia en Carriers es tener que abrir la puerta del auto y obligar a que el nuevo infectado se baje para poder seguir tu camino, la facilidad con que en apariencia se destrullen los sentimientos y las relaciones humanas, cuando la muerte y la putrefacción es inminente. Carriers es una road movie atipica, casi poética donde también pueden ocurrir situaciones ya vistas, como el grupo de hombres que sobreviven y quieren secuestrar un par de chicas para satisfacerse, un padre que quiere salvar a su hija, pero todo se deshace y se pierde, todo se ahoga en la perplejidad de un cielo azuloso que presencia la tragedia imperterrito. La carretera lo borra todo cuando ya no pasa nada, cuando ya no hay ninguna historia posible, el último aliento de vida es sólo un recuerdo idilico al que aferrarse, con la convicción de que las olas seguiran golpeando la tierra aunque desaparescamos.
martes, 24 de agosto de 2010
La cinta blanca
Esta vez Haneke no tan sólo hace gala de esa habilidad sino que además se da el lujo de filmar una obra compleja, coral, con ciertos tintes alegóricos, que no recurre a ningún tipo de maroma o encriptación, y juega siempre con las cartas sobre la mesa, dándose el lujo de coquetear con cierto tipo de thriller protagonizado por niños, que muy pocas veces nos ha dejado buen sabor de boca al salir del cine. La cinta transcurre en un pequeño pueblo protestante al norte de Alemania donde comienzan a ocurrir una serie de crímenes, que en un principio no parecen tener conexión, pero después empiezan a delinear una serie de relaciones oscuras, además de estar relacionadas con secretos de ciertos personajes del pueblo, como el Baron y el Doctor; niños torturados, granjeros suicidas, incendios premeditados son parte de la gama de atrocidades que ocurren.
Haneke esta vez no detiene en detallar lo caprichosa y banal que puede ser la crueldad, sino que se esfuerza en componer un cuadro detallado y complejo de una comunidad, donde todos son afectados de alguna forma con cada crimen, poniendo al espectador en el lugar de un joven profesor de otra localidad, que comienza a atar cabos y tiene cierto interés en descubrir la verdad. Filamada en colores pero proyectada en blanco y negro, Haneke decide usar ese recurso para escenificar el esfuerzo de un grupo humano, que cree ciegamente en la posibilidad de llevar una vida basada en una moral maniquea y sin tonos medios, el título del film se debe a que se acostumbra poner una cinta blanca en los niños, para dar cuenta de su total pureza e inocencia. Haneke consigue desarrollar a cada personaje de manera génerica como si este fuera uno de muchos ejemplos, uno de mil relatos que se repitieron en los albores de la primera guerra mundial.
Y es que el objetivo de la obra no es filmar un thriller al uso, sino que dar cuenta de un relato que es capaz de explicar como la creencia de una fe total, en una forma de entender el mundo, es capaz de engendrar un tipo de monstruosidad absoluta y perfectamente irracional, a la manera de Hanna Arendt o Marc Broch, Haneke filma una obra donde da cuenta del surgimiento de los totalitarismos, y es que en los libros de historia siempre se nombra a Hitler y al nazismo pero rara vez se responde como un país, o una comunidad completa fuerón capaces de avalar el horror, cuya pureza o ideal, nunca estuvo disfraza. Sin embargo el mayor acierto de la cinta es su claridad, su capacidad para exponer lo sustancial, la herida abierta de una serie de impulsos reprimidos que terminan deformando a quienes los experimentan.
miércoles, 4 de agosto de 2010
El hiperrealismo de Takehiko Inoue
Corria el siglo XII y María de Champagne le encarga a un clérigo y poeta llamado Chrétien de Troyes la composición de una serie de romances, donde se cuentan las aventuras de los caballeros que son parte del Ciclo Artúrico (Perceval, Lancelot, etc.). El objetivo de tales obras era moderar la conducta de la gente de la corte, que gustaba más de las fiestas orgiásticas y de retozar a campo abierto. A partir de las aventuras y el aprendizaje de los caballeros, la gente aprendía modelos sobre moral y ética, tanto como las formas correctas de controlar sus pulsiones libidinales, porque los caballeros debían aprender no tan solo el arte de la guerra, sino que también el arte del amor. El ejemplo es antiguo, pero en él encontramos los rasgos esenciales de cualquier relato heroico; una estructura que condensa las ideas de una determinada clase dominante, que a partir de ciertos relatos transmite no tanto lo que es correcto e incorrecto, sino lo que podemos entender por héroe, cuando hablamos de alguien con capacidades extraordinarias, que realiza acciones más allá de los límites de la gente común.
En este sentido los héroes de los relatos tienen dos objetivos que a veces corren juntos o separados: el primero es probar, a partir de sus acciones, ser parte de una casta de seres superiores, mientras que el segundo consiste en establecer o devolverle el orden a una comunidad. Un ejemplo clásico del primer motivo es Hércules que realiza los doce trabajos para poder acceder al Olimpo y ser reconocido como parte del panteón. Mientras que en el segundo tenemos a Jesucristo que se sacrifica para purificar y volver consciente de sus pecados a la humanidad, al mismo tiempo que prueba su origen divino. Esto puede retorcerse y presentarse de diversas formas, la complejidad y riqueza de un personaje depende de cómo se utilicen estas ideas. Por ejemplo, y saltando ya al terreno de las viñetas, el Batman de la película Dark Knight acepta cargar con el peso de los crímenes de Harvey Dent para mantener la imagen de éste y no quebrar la única posibilidad de orden. Se vuelve un antiheroe solo en apariencia, porque lo principal es el sacrificio en post de la comunidad al igual que Jesús. Por otra parte Superman puede ser un personaje interesante porque es parte de una civilización superior que se ha extinguido, quedando solo él, por lo que ese desarraigo hace que su relación con la comunidad de seres humanos pueda ser tremendamente problemática.
Lo que dije antes me sirve de argumento para intentar dar cuenta del tremendo placer que experimento al leer los mangas de Takehiko Inoue. Más de alguno lo reconocerá si advierto que es el creador de la popular Slam Dunk, más de alguno también pensara que no es más que una suerte de Jim Lee asiatico que gusta de una estética realista. El asunto es que los personajes de Inoue son bastante atípicos y se mueven en una condición existencial marginal. Inoue adora a los tipos peleadores que no saben hacer otra cosa en la vida que jugar con un balón –no digo patear porque este autor adora el basquetball, en fin–, sujetos pasionales y pulsionales que no se adaptan a las reglas del sistema pero que canalizan sus energías y emociones vitales a partir de una actividad física. En Slam Dunk Inoue trata el tema de la adolescencia, su condición problemática y cómo se adaptaba Hanamichi Sakuragi y compañía a partir del básquetbol, logrando cierta experiencia épica de la vida, claro sin dejar de lado cierto condición trágica porque solo pueden practicarlo mientras están en la secundaria.
Inoue continuará lo trazado en Slam Dunk en dos obras ya de madurez, donde prácticamente toma a sus antiguos personajes donde los dejo; eso sí, a partir de otras historias. La primera es Vagabond, un manga de samuráis donde Inoue cuenta (su modelo es una novela de Eiji Yoshikawa) la vida de Miyamoto Musashi, el samurái japonés más famoso, que practicó el bushido (camino de la espada) hasta sus últimas consecuencias, pero siempre desde la precariedad y la pobreza, negando todo rasgo noble, vanidoso y autoritario propio de los samuráis del siglo XVI donde existía una rígida estratificación social, en la que los guerreros estaban en la cima. Musashi se convierte en el más fuerte y célebre hombre de su tiempo viviendo como un indigente. Inoue nos cuenta esa historia desde que Musashi tiene 17 años, y no es más que un joven que está saliendo de una niñez tormentosa y violenta, convertido en una bestia con sed de sangre a tal punto que mató a un hombre por primera vez a los 13 años.
Vagabond va por el tomo 33 y aún falta camino, por lo que absorbe todo el tiempo de Inoue. A pesar de ello éste vuelve a su pasión, el básquetbol, con una serie que realizará en sus descansos: Real. Es una obra que comienza donde termina Slam Dunk. Nomiya, uno de sus protagonistas, es expulsado del colegio por haber sido responsable de un accidente donde una joven queda parapléjica, por ende carga con una culpa inmensa, a demás de ser privado de la posibilidad de jugar básquetbol. El segundo protagonista es Togawa Kiyoharu, un joven de 20 años sin una pierna que práctica el básquetbol en silla de ruedas. Habrá un tercer protagonista que triangulará la relación de los personajes. La obra tiene como centro el básquetbol en silla de ruedas., pero es solo la excusa para hablar de la relación problemática de las personas con su cuerpo cuando están mutilados, hablara de la culpa y el desconcierto, cuando no se puede desarrollar aquello que da sentido a la vida. Y ese es el problema principal, los personajes de Inoue están imposibilitados de llevar sus vidas a partir de un relato establecido que los integre a una idea de sociedad, Miyamoto Musashi es considerado un criminal por lo que debe cambiar de identidad, mientras que Nomiya es el clásico hombre gorila que en apariencia es puro músculo pero interiormente sufre por no poder conectarse con la gente.
Inoue desarrolla un estilo hiperrealista basado en la presencia de infinidad de elementos presentados de manera clara y precisa dentro de la página, es cosa de ver alguna viñeta de Vagabond a campo abierto, o los paisajes urbanos de Real, donde la realidad en la que orbitan los personajes está presentada de manera tan clara, rotunda y concreta que la estética sirve de base para afirmar esta incapacidad de los personajes de asimilar un relato vital, porque están aplastados por la sociedad y el lugar que les asigna. Por ende, el centro de las obras de Inoue es la búsqueda de sentido para la existencia, nada de jerarquías y castas, ni órdenes perdidos, simplemente el goce y la consciencia de algo llamado vida, manifestado en la perfección de un tiro de tres puntos o el silencio filoso de una katana que sigue la trayectoria de un golpe mortal.
lunes, 2 de agosto de 2010
Pateando Culos
No son pocos lo que le enrostran a Mark Millar ser el blockbuster del cómic; un tipo que escribe guiones para obras espectaculares, con un ojo puesto en la posible adaptación cinematografica. También se le acusa de mezclar personajes de manera impune como ocurre con Némesis que se presento con la premisa; "¿si el Joker fuera Batman?". La verdad es que si trabajas para la industria es mejor ser astuto y tomar las riendas de tus creaciones, porque en estos tiempos donde hasta a Rob Liefield le han ofrecido adaptar sus ilustres viñetas a la pantalla, es mejor tener cuidado con lo hacen con tu obra, no te vaya a pasar lo que a Morrison a quien le plagiaron Los Invisibles de manera flaite e impune. La verdad es que no hay pecado en quere asegurarle el futuro a tus hijos, parece que al mundo le desagrada que Millar sea tan directo, la verdad es que prefiero eso al lameculismo de Stan Lee y su pinta de abuelo bailarin.
Con respecto a lo segundo, Millar le ha dado dinamismo a una industria chata e inmóvil hasta la oscificación, dando rienda suelta a un finisimo sentido de la parodia. Kick Ass es una obra que actualiza el espirítu del Spider-Man de Steve Ditko de manera hilarante y corre una cantidad de riesgos demenciales para un comic book, no tengo idea hasta que punto Millar mete las manos en la producción y el guión de la adaptación pero como ocurrió con Wanted, la adaptación es otra obra, que no le hace ni cosquillas al original. La película de Vaughn es otra cosa, una versión softcore, que no tolera en algunos puntos la ausencia de ficción del cómic de Millar - Romita. Mención aparte para Hitgirl, porque la verdad es que Millar y Romita se sacaron del sombrero un segundo Wolverine.
viernes, 30 de julio de 2010
The Fixer
El personaje se llama The Fixer, y un aventurero en busca de una misión. Ha sido entrenado en operaciones especiales, y cuando atacan su ciudad, de pronto todas las piezas se colocan en su sitio y todo su entrenamiento entra en juego. Él ha estado ahí luchando contra el crimen sin poner su alma en ello… lo hace para mantenerse en forma. Es una criatura mejor adaptada a la sociedad, aunque a lo largo de la historia dispara a 100 personas.Parece que Miller volvera en gloria y majestad, desechó a Batman, para sacarse del bolsillo a un personaje a lo Hartigan, de su propia factoria.
Frank Miller al habla/ Vía Entrecomics
sábado, 24 de julio de 2010
Trailer de Walking Dead de Frank Darabont
Lamentablemente noes la mejor calidad, pero de todas formas de disfruta y el sonido es bastante decente.
viernes, 23 de julio de 2010
Ediciones B publicará Karma Police
Y me saco el sombrero con la gente de Mythica que dejo emigrar al tandem Baradit-Caceres entendiendo la importancia de que una gran editorial comience a publicar narrativa gráfica. Quizás es el primer gran paso para que los dibujantes y los guionistas puedan llegar a vivir de su arte.
Baradit da la noticia en su desquiciado Blog.
lunes, 19 de julio de 2010
Entrevista a Matías Bize
sábado, 3 de julio de 2010
Scott Pilgrim en Indie.cl
Segunda crítica de cómics en Indie.cl, esta vez le doy un par de palos al mainstream superheroico de la mano de Scott Pilgrim.
A primera vista, y antes de adentrarnos en la obra, cabe decir que el éxito de Scott Pilgrim es el signo de un cambio más profundo, que comienza a ocurrir en el centro de la industria del cómic, en el mainstream estadounidense; y es que nuestros queridos súper héroes de toda la vida están en retirada, para dejarle el centro a las obras del cómic moderno, a una nueva sensibilidad que antepone la experiencia y el arte antes que la industria, y que cambia al fandom endogámico por cualquier lector crítico y ágil. Tenemos obras: Persépolis, Épileptico, Agujero Negro, George Sproott, solo por citar cuatro títulos que se me vienen a la cabeza. Tenemos autores: Joan Sfar, Lewis Trondheim, Chris Ware, Daniel Clowes, Joe Sacco, Jason, Jiro Taniguchi y un largo etc. Y más aún tenemos una gloriosa y multicultural galería de precursores: Alan Moore, Will Eisner, Frank Miller, Yoshihiro Tatsumi, Art Spiegelman, Robert Crumb y un aún más largo etc. Puede que Scott Pilgrim no le vaya a la saga en profundidad, experimentación y valor crítico a las obras y autores citados, sin embargo posee una libertad creativa, a la par que una capacidad para explorar ciertos sentimientos que está más en sintonía con los autores que están más arriba que con los hombres y mujeres en piyama de DC y Marvel
jueves, 1 de julio de 2010
Merchandising
miércoles, 30 de junio de 2010
martes, 29 de junio de 2010
Tezuka Kidd
Las imagénes de arriba son las obras suyas que más me gustan, son diseños para obras de Osamu Tezuka publicadas por la editorial estadounidense Vertical. La primera imagen corresponde a Apollo's Song obra que como no he leido (no tiene edición en español), no tengo idea que intento hacer Kidd, así que pasemos a la alucinante Oda a Kirihito, que Vertical publicó en dos tomos con la misma portada, salvo por la huincha transversal con el título nombre de autor que uno puede mover a derecha e izquierda y presenciar la tranformación del Doctor Kirihito (esta fue editada en español por la fenecida Otakuland). La quinta imagen corresponde a MW y es notable, como Kidd juega con las letras del título a partir de la distorsión de la identidad del protagonista, en fin, ya ni hablar de la imagen inferior con esas expresión entre dolor y placer puesta con un morado intenso. Y la última imagen es mi favorita, es notable lo que hizo Kidd con los tomos de Buddha; así cualquiera quiere tener a Tezuka en su estanteria.
domingo, 27 de junio de 2010
El Escapista de Michael Chabon
Por fin encontré la novela de Michael Chabon: "Las asombrosas aventuras de Kavalier y Clay", cuyas 700 y algo páginas me estoy devorando. En ella se cuentan las peripecias de Sam Clay y Joe Kavalier, dos muchachos judíos que hacen carrera en el mundo de los cómics en los años cuarenta, con su personaje El Escapista: maestro de la fuga y la prestidigitación que es capaz de liberar a los oprimidos de cualquier atadura. En plena segunda guerra mundial la novela explora y da cuenta del nacimineto de la industria del cómic, de los problemas para ser percibido como arte, de su influencia al combatir los superheroes el nazismo, la explotación de los dibujantes y guionistas a quienes se les arrebatan sus derechos. Todo a partir de una editorial inventada: Empire cómics, que por supuesto compite con las majors de la época como Timely (que ahora conocemos como Marvel) y National (que ahora conocemos como DC).
Buscando en internet, descubri que Dark Horse publicó seis números de 80 páginas del Escapista, invitando a variados artistas; desde Jason a Eddie Campbell, a participar realizando historias cortas no tan sólo del personaje principal sino que de otros que aparecen en el libro de Chabon como Polilla Luna.
sábado, 12 de junio de 2010
Más sobre el Génesis
Marco Rauch, editor de Mythica desmenuzó también el Génesis de Crumb, y bueno, no estamos para nada de acuerdo con respecto a la obra. Así es que haré mis descargos en los comentarios de 2Cy1M.
Vía/DosCafésyUnaMesa.com
miércoles, 9 de junio de 2010
Leyendo a Bisama
"Justo con un estallido, el de una bomba colocada en un restaurante de Santiago, inicia Caja negra, cuya trama se fragmenta en esquirlas que vuelan en distintas e insólitas direcciones donde confluyen un rockero japonés que desaparece misteriosamente –la desaparición como fuga metafísica es una de las preocupaciones de Bisama–, un productor de cine trocado en terrorista, unos gemelos que dirigen películas de culto, una estrella de glam rock y un autor de novelas policiacas dispuesto a revelar el mundo que acecha “detrás del lenguaje. Las palabras ocultan ese mundo. Sólo tachándolas se puede entrever el mecanismo. Es un mundo [...] desencajado, inenarrable [...] pero no lo vemos porque las palabras lo tapan”. La fragmentariedad también está presente en Música marciana, donde un viejo ex drogadicto narra la vida y enigmática muerte o desaparición de sus catorce hermanos para ilustrar con nitidez los versos de Enrique Lihn citados en Caja negra: “Una condensación de absurdos personajes, algo como el horror de un álbum de familia.” En ambas novelas se dibuja asimismo la figura de un patriarca elusivo: en Caja negra, Samuel Mori se esfuma sin dejar huella luego de convertirse en fan de las cintas de sus hijos; en Música marciana, el pintor surrealista que funge como trasunto de Roberto Matta hace de sus gafas oscuras un parapeto que lo defiende de su vasta progenie (los dos patriarcas, aún más, comienzan el exilio en travesías marítimas que se complementan: Mori viaja de Europa a América mientras que el trasunto de Matta emprende el trayecto inverso). En ambas novelas campean las críticas a la identidad chilena: “Hablamos en chileno, en esa habla informe que persigue, que acosa a las otras como si fuera un monstruo, una personalidad escondida” (Caja negra); “Despreciaba de su país de origen [esa] medianía que por momentos se transformaba en locura, en puro miedo cerval al abandono, en una versión lamentable de la pena” (Música marciana). Ambas novelas concluyen con estampas líricas de un apocalipsis que amenaza un territorio “donde los habitantes hablan una lengua que enuncia el mal mejor que ninguna”.
lunes, 7 de junio de 2010
Críticando cómics en Indie.cl
Por otro lado al escribir sobre cómics, me siento inevitablemente solo y abandonado, porque el cómic en Chile no es reconocido por los medios, la única forma en la que se manifiesta se da cuando se estrena un filme que es una adaptación. Esto es bastante incomodo y produce problemas de espacio, porque inevitablemente al cómic le toca la pieza más chica de la casa, y pasa a ser un objeto parasitario que tiene como consecuencia la publicidad viral con la que se promocionan este tipo de películas. Ya ni hablar de las obras que eligen adaptar. En este sentido creo que críticar cómics en este país es un esfuerzo un tanto quijotesco, porque la gran mayoría de lectores verdaderos son también parte de la misma pequeña industria que se esfuerza por salir adelante y hacer obras, yo mismo incluso soy aspirante a guionista. Por eso me parece un esfuerzo valioso la crítica, porque no tan sólo ayuda a generar discusión y para configurar determinadas obras que pueden convertirse en influencia, o para reflexionar acerca de la producción local, sino que más aún como una forma de introducir y engendrar lectores que se sientan acogidos por el espacio vital que representa cada viñeta como un nuevo territorio a explorar.
Primera crítica de cómics: el Génesis de Robert Crumb
viernes, 4 de junio de 2010
Diez razones por las que me gusta Scott PIlgrim
martes, 1 de junio de 2010
Monster de Urasawa editado por Larp y la rentable infantilización de los lectores
Monster es un imprescindible, por eso me hice con el tomo apenas cayeron las cajas de Larp por estos lados. En un principio me decepcionó bastante la calidad de la edición, un papel que si bien mantiene cierta blancura con mucha dignidad, se transparenta en ciertos pasajes de manera grosera. Una encuadernación humilde, y una traducción que si bien es efectiva tiene unos cuantos errores que de seguro se produjeron en la rotulación. Sin embargo lo que más me quemó, fue que no tuvieron la buena educación de colocar notas al pie con la traducción de las palabras en alemán. En los últimos tres años los argentinos han publicado sólo 3 títulos interesantes para adultos, o Seinen; Vagabond de Takehiko Inoue, Gantz de Oku Hiroya y Monster de la que acaba de aparecer el primer tomo hace una o dos semanas. Sólo tres obras que exigen a los lectores una comprensión más profunda, que los manidos relatos de superación y formación que se van a repetir hasta el final de los tiempos. El 95% de lo que se imprime en Argentina es material puramente comercial, apelando a las series de moda como Naruto, One piece o Bleach, tanto como a la nostalgia a partir de obras como Saint Seiya, Slam Dunk, Ranma, Inuyasha o Samurai X. El mercado argentino no quiere madurar y en gran medida se dedica a alimentar al fandom, perpetuando la forma en que este consume las obras como objetos fetiches, y no como lectores dinámicos con la suficienta capacidad crítica para establecer la relacion que hay entre el título como identidad y su formato material. Y es que la reciente edición de Monster no se diferencia en nada a como editan Deathnote o One Piece, no hay ni una marca o gesto que aliente a otro tipo de público a leer las obras, a pesar de que estas necesiten de otro tipo de lector para desarrollarse plenamente. La cálidad de las publicaciones también ha mantenido cierto nivel medio, no se aprecia ninguna intención de acercarse al nivel de editoriales como Glénat. No me gusta el panorama, no me agrada que en vez de publicar títulos nuevos e interesantes se reediten obras comerciales bajo el rótulo de edición deluxe cuando lo único que le agregan es una solapa, por la cual doblan el precio. La infantilización del público y la nostalgia es una de las consecuencias del capitalismo depredador, que sólo quiere ampliar sus digitos, convirtiendo al adulto con experiencia y capacidad crítica en un consumidor-niño, al tiempo que se establecen politicas editoriales conformistas que no abogan por subir el nivel de profesionalismo de quienes trabajan en las editoriales.
El cómic es el único medio que establece una relación directa y discursiva con su soporte material, por eso las politicas editoriales son significativas y dan cuenta de la realidad inmendiata tanto del mercado como de los lectores. Falta mucho para que veamos una edición como el Monster Kazenban que comenzó a editar Planeta el año pasado, una edición muy cuidada, con páginas a colores, y un papel de alto gramaje e impoluta blancura, que en sólo nueve tomos contiene la historia completa. De esta forma se hace justicia a una obra imprescindible, que a partir de este formato llegara a una masa de lectores que se verán influenciados de manera gravitante por ella, si es negativa o positivamente, es cuestión de cada uno, por algo estamos entre adultos ¿o no?
miércoles, 5 de mayo de 2010
"They fuck with the wrong mexican"
Fuck Arizona!!!!!
lunes, 3 de mayo de 2010
Criticando
Tengo botado el blog, porque me las estoy dando de crítico de cine y de comics para Indie.cl y acaban de subir mi primer texto sobre cine (en el link esta integro): una comparación crítica entre La nana de Sebastian Silva y La teta asustada de Claudia Llosa. Les dejo el primer párrafo como boton de muestra.
La falta de recursos en el cine latinoamericano es la causa que lo condena a la referencialidad. No hay cinta filmada bajo tales límites territoriales que no acuda a los referentes más cercanos, siempre y cuando de ellos se pueda extraer alguna buena historia. Un director latinoamericano jamás podrá darse el lujo de filmar una epopeya romántica de esas que salen a borbotones de los estudios hollywoodenses; porque una película filmada en estos pagos es más el esfuerzo de un pueblo, de un grupo social, que de una industria. Por eso no es casual que cada vez que una obra sale a La falta de recursos en el cine latinoamericano es la causa que lo condena a la referencialidad. No hay cinta filmada bajo tales límites territoriales que no acuda a los referentes más cercanos, siempre y cuando de ellos se pueda extraer alguna buena historia. Un director latinoamericano jamás podrá darse el lujo de filmar una epopeya romántica de esas que salen a borbotones de los estudios hollywoodenses; porque una película filmada en estos pagos es más el esfuerzo de un pueblo, de un grupo social, que de una industria. Por eso no es casual que cada vez que una obra sale a competir al extranjero, éste o tal certamen tenga en vilo a un país en el instante en que se abre el sobre que hará gritar a algunos y llorar a otros. Dicha situación de compromiso nacional no ocurre muy seguido. Lo más común y lo más interesante es observar cómo el público recibe ciertos filmes, porque inevitablemente tales obras, en Latinoamérica, dicen y exponen algo de quienes están sentados en las butacas.competir al extranjero, éste o tal certamen tenga en vilo a un país en el instante en que se abre el sobre que hará gritar a algunos y llorar a otros. Dicha situación de compromiso nacional no ocurre muy seguido. Lo más común y lo más interesante es observar cómo el público recibe ciertos filmes, porque inevitablemente tales obras, en Latinoamérica, dicen y exponen algo de quienes están sentados en las butacas.
jueves, 8 de abril de 2010
Más Vatifilia y ¡LA MOMIA ROJA!
(Clickear encima para agrandar)
El humor gráfico tiene toda una tradición en este país, doy fe de ello, y es que en lo personal he de asumir que mis primeros cómics fueron las Topaze que venían los domingos en el diario La Tercera ¡así es! mi primer acercamiento al mundo del cómic fue con una revista de humor político; ni idea si entendía algo de lo que había en esas páginas, pero esos dibujos causaban una poderosa atracción en mi. El esfuerzo de Christiano y compañia busca revivir y encausar esa tradición, y eso en los tiempos que corren, con un periodismo prácticamente unidimensional ,ligado a los grupos de poder ecónomico que son quienes mas encima gobiernan ,es algo notable. Podemos participar de esto y hacer que un nuevo medio de comunicación masivo y de calidad surja, circule en papel y sea una verdadera oposición al gobierno, a través del lenguaje gráfico, que en lo personal es de los más subversivos y universales, así que a ayudar que un par de lukas no es nada.
martes, 6 de abril de 2010
Chile Steampunk
En la página de Mythica ediciones se puede ver un adelanto de diez páginas de la que al parecer será su próxima publicación: 1899, que nos trae a Francisco Ortega como guionista y Nelson Daniel en los lápices. El adelanto es estupendo y promete mucho.
¿De que va 1899? Aquí entrevista a Francisco Ortega y Nelson Daniel en Blogzup
lunes, 5 de abril de 2010
La reconstrucción de Chile
¡Otra ilustración notable! e increiblemente lucida con respecto al acontecer politíco del país. Eso si, es obra de El Gat invisible, artista que trabaja para EL TEMPS de ¡Cataluña!.
Vía/ The Clinic
domingo, 4 de abril de 2010
Santa acabada
Acaba semana santa, y no me siento ni más ni menos santo. Terminé sin huevitos de chocolate y, a su vez, terminó mi viaje de un cruzero por islas paradisíacas, lamentablemente, de la peor manera. Muchas veces los caminos que uno recorre en pos de algo se tuercen, de eso, ni siquiera el camino a la santidad se salva, bien conocido es el dicho popular que explica cómo el camino al infierno está lleno de buenas intenciones. Cada fin propone un viaje, ahora bien, esos viajes, por más planeados que estén, pueden variar. Muchos somos los náufragos que nos perdemos en ilusorias y, a veces, terrorificas sendas o tentaciones, sin embargo, en este punto, lo que diferencia a un santo de cualquier otro sujeto, es que el santo puede tomar incluso el camino más abyecto y transformalo en algo sublime, bello. Ejemplo de aquello es la siguiente cita, que deseaba compartir con ustedes:
"Veíale en las manos un dardo de oro largo, y al fin del hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces, y que me llegaba hasta las entrañas. Al sacarle, me parecía que las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. Era tan grande el dolor, que me hacía dar aquellos quejidos; y tan excesiva la suavidad que me pone este grandísimo dolor, que no hay desear que se quite... No es dolor corporal, sino espiritual, aunque no deja de participar el cuerpo algo, y aun harto. Es un requiebro tan suave que pasa entre el alma y Dios, que suplico yo a su bondad le dé a gustar a quien pensare que miento"