lunes, 29 de marzo de 2010

Låt den rätte komma in

Ese es el nombre original de la película, que en españa se llamo Dejame entrar, título con un sentido tremendamente profundo para la mitología vampiríca, y que en el estupendo film de Tomás Alfredson adquiere interesantes ribetes simbólicos. Lamentablemente aterrizo en nuestras terremoteadas salas con el horrendo nombre de Criatura de la noche, ni que fuera un remake de una de Wes Craven, en fin que es un deber moral de cualquier cinesifilitico pagar la entrada y disfrutar de esta joya, que harto esperamos y aguantamos DVD en mano.

Como ya la habíamos visto antes, un colaborador de este blog, nos lego un texto (si alguien conoce paradero de Mis_polainas, se ruega enviar información).

Déjate entrar

domingo, 28 de marzo de 2010

"Sin nombre" de Cary Fukunaga: El abrazo roto

Ahora que todos los países de Ámerica Latina se aprestan a celebrar los doscientos años de independencia, vale la pena tener presente que lo único que ha caracterizado estos dos siglos de vida "autónoma" (mejor ni entrar en detalle con respecto a los casos de intervencionismo), es la imposibilidad de erradicar la violencia del continente, violencia heredada desde que Colón se bajo de su carabela y que encuentra manifestaciones contemporáneas por toda la región como: los horrores de Ciudad Juaréz en la frontera entre México y Estados Unidos, las maras de centroamérica, las guerrillas y los sicarios en colombia y un largo etc. Esto llega a tal punto que es a partir de la violencia que se instauran las políticas neoliberales en el continente, teniendo como puntapie inicial la dictadura presidida por Pinochet en esta larga, angosta y terremoteada faja de tierra. Por eso no es casual que desde sus manifestaciones más brutales hasta las más simbólicas, sea la violencia un motivo presente a priori en el cine latinoamericano; desde películas ya famosas como Ciudad de Dios (2002) de Fernando Meirelles, hasta obras maestras menos conocidas como La mujer sin cabeza (2008) de Lucrecia Martel, sin olvidar por supuesto, películas recientes como La teta asustada (2009) de Claudia Llosa. Sin nombre (2009) de Cary Fukunaga se destaca por dos elementos: su película habla de la inmigración y de las maras, por ambos motivos podría pasar a engrosar una lista sobre el cine latinoamericano contemporáneo, sin embargo su director, al igual que ocurre con Joshua Marston y María llena eres de gracia (2004), es estadounidense, eso si de madre sueca y padre japonés.

Al principio Sin nombre nos narra dos historias: la de Cásper y Smiley al interior de la mara salvatrucha en Chiapas - México y la de Sayra en Honduras. En la primera asistimos a la incersión de Smiley en la mara y todo lo que eso connota, partiendo por una brutal golpiza de doce segundos que se le propina a todos los recién llegados. Y al conflicto de Casper que esta enamorado y sostiene un romance con una chica que vive hacía el centro y no tiene nada que ver con los mareros, por lo que roba tiempo de sus obligaciones con la banda para dedicarselo a ella. En el segundo arco argumental vemos como el ausente padre de Sayra retorna a Honduras tras ser deportado de Estados Unidos, y quiere emprender un viaje a través del Salvador y México para entrar de manera ilegal a Nueva Jersey. El film nos expone la marginalidad total de los personajes sin caer en excesos, basto un plano general de Sayra escuchando a su padre quien quiere llevarsela para darle un mejor futuro,para ver de fondo las miserables casitas de un suburbio hondureño. Quizás al principio la historia de Casper y Smiley desequilibran el conjunto del metraje, dado el salvajismo y la brutalidad de las maras, pero después todo retorna a su cause cuando la historia se entronca a partir del viaje en el techo de un tren de carga que atraviesa méxico de sur a norte, punto en el que se encuentran Casper y Sayra, el primero huyendo de una venganza consumada y una condena en vías de ejecución, mientras que la segunda viaja por la voluntad de su padre con quien no tiene muy buenas relaciones. El viaje es por una ruta marginal, y bajo las peores condiciones, siempe con miedo por ser descubiertos por la policia de inmigración o por ser asaltados por cualquier banda. Todos son personajes que se mueven como fantasmas, porque no existen para un estado legal, no hay ni una autoridad o tipo orden en el film, todo esta regido por la fuerza y la violencia, todo esta reducido a una gama de instintos primarios.

La película posee varios méritos cinematograficos, Cary Fukunaga director de cine con estudios académicos en Nueva York se acerca a una realidad que absolutamente desconocida para él con la máxima naturalidad posible, respetando incluso el uso de dialectos, nada de hablar un castellano neutro para que esto se entienda desde Ciudad de méxico hasta Barcelona. En segundo lugar no cae en tremendismos ni exageraciones al exponernos la brutalidad de la realidad que nos expone, de hecho la dirección de fotografia es increíblemente sobria y equilibrada sin exagerar ni mesurar nada, mostrandonos una paleta de colores que refuerza la sensación de naturalismo que envuelve los escenarios. Los personajes no son arquetipos, sino que se mueven y reaccionan de acuerdo a un conjunto de valores y normas asociadas a su cultura y emociones. Un claro ejemplo de esto ocurre con los mareros, de hecho Fukunaga nos expone a la Salvatrucha cámara al hombre como si un documental se tratara, sin emitir juicios de valor con respecto al colectivo sino que poniendo sobre la mesa los claroscuros de la banda, vemos lo salvaje que pueden ser sus rituales y costumbres, así como vemos la camarderia y los vínculos emocionales que estos desarrollan como si fueran una familia. Y aquí llego a lo más notable, porque Fukunaga centra su película en un solo tema, frente la desmesura y pesades de la realidad que nos expone, centra su cámara en un sólo punto desde el cual se despliegan todos los personajes y adquieren sentido las acciones: las relaciones filiales. Sin nombre es una película sobre la necesidad de arraigo de personajes que se mueven en otro mundo, pero de un arraigo emocional, la idea de nación no existe en esta película salvo como una forma de coherción, todos los personajes buscan establecer relaciones filiales, ya sea a través de la mara como una familia que niega cualquier otro princio de unidad o de la unión a partir de la búsqueda de un sueño en común, que rara vez no términa por torcerse.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Celeste Buenaventura


Es moneda corriente que en la Isla Chiloé, ubicada al sur de Chile que es el espacio dónde transcurre el presente cómic, las madres solteras tiendan a atribuir sus retoños al Trauko, suerte de hombrecillo rudo que hace de las suyas en los bosques y lugares solitarios de la isla dejando embarazada a cuanta damisela se adentre en sus dominios. Dicha leyenda esta en el centro de la obra en cuestion, y parece que ese tono picaresco que la domina termina dejando de lado cualquier posible dramatización. Y es que el panteón mitologico chileno se caracteriza por dar cuenta de problemas y situaciones domésticas, a escala humana, delineando dramas intimos y desarraigados de cualquier gran conflicto existencial. Esto no quiere decir que Celeste Buenaventura sea un cómic poco serio, muy por el contrario, es una obra en la que su protagonista es acusada de un crimen. Un asesinato que involucra al hombre que ama, en un momento que es el punto en el que Celeste se abrira al gran caudal de emociones humanas ,que marca nuestro paso a la adultez, parece que Celeste se iba a encontrar con el Amor pero en el camino se atraveso la Muerte.
Y es esto último lo mejor del cómic, lo más logrado; todo empieza como un clásico encuentro en una niña de provincia, huerfana, que no esta destinada a grandes cosas en esta vida y su amigo de toda la vida: Conrado, que asiste a la universidad en una ciudad-capital. El diálogo no dice tanto como el dibujo, ese abrazo ambiguo y esas miradas cercanas que esconden grandes sentimientos, esos signos de dos jovenes que comienzan a descubrirse un nuevo mundo,para ellos hasta que otro mito picaresco se cruza en su camino: el del pillo chileno. Común es el dicho que dice la oportunidad hace al ladrón, el problema es que en Chile la ética se reduce a que si no aprovechas la oportunidad eres un idiota redomado y perteneces a otro bando, eres otra clase ser humano. Suena simple y común, sin embargo esa forma de actuar ha engendrado actos de mucha maldad. Y como decía antes, parece que la pareja iba a seguir la senda del amor pero se aparecio la muerte, pero Celeste no esta sola aparece su padre el Trauko y su mundo se expande, se abre hacía toda la mítologia local convirtiendo a Celeste de una niña común de provincia en la hija de un hombre legendario, lo que claro suena postivo, pero más que eso es complejo, y ahí esta el segundo acierto de la obra, y es que Celeste se inserta en este mundo mitologico, no como una variable mágica de su mundo sino que como variable compleja, el paso a la adultez esta marcado por la comprensión traúmatica de que el ser humano esta imbricado y conectado a una serie de poderes y variables que superan su individualidad, esto último esta representado por el panteón mitologico chilote, por las envidias y recores de personajes como la Fiura, poderes en las sombras y reencuentros familiares que Celeste sufre y comprende porque en su camino se cruzo la muerte. Conectar a un ser humano común y corriente con los poderes que constituyen nuestro mundo es motivo clásico en lo que se refiere al uso de la mitologia, la forma a escala humana que da el guión de Rauch es notable, más aún cuando construye un personaje femenino que problematiza ciertos aspectos básicos y arquetipicos en su relación con las figuras masculinas. Puede que sea una lectura para adolescentes, pero de que el cómic chileno esta mejorando, no hay duda.

viernes, 19 de marzo de 2010

Hell And Back

No se en que momento perdí el rumbo; depresión, problemas académicos y familiares, una maraña de emociones parecidas a un abismo me envolvio por bastante tiempo. Con ayuda de amigos, familia y polola logré salir. Quise comenzar un nuevo año de la mejor forma posible, viendo todo con nuevos ojos y energías, emprender proyectos ansiados hace bastante tiempo y dedircar más de mi a quienes quiero.
Pues bueno el año no comenzó de la mejor forma posible, de pronto este país mostro su peor cara; la ignoracia, la irresponsabilidad y una etíca de libre mercado que permea a todas las clases sociales llevaron a que un multimillonario de derecha, ligado a la dictadura militar (que como toda dictadura que se precie masacro y extermino a miles de personas), fuera elegido presidente. La desason fue muy grande, asumir que este país no tiene memoria lo fue aún más.
Y como los trances historicos a veces tienden puentes hacía problemas más intimos y personales a los pocos días falleció mi querido perro, así es, mi mascota desde hace catorce años murio de manera violenta y estrepitosa en las ruedas de un vehículo pesado. No es que le eche la culpa al multimillonario de derechas de la muerte de mi perro, es sólo que la decepción y la pena parecian querer mover las piezas de la realidad inmendiata, para ajustarla a sus objetivos, a las emociones con que gustan poseernos.
Y para el final esta la guinda de la torta; viernes 27 de febrero, 3:34 a.m. Duermo con un placer, unas ganas, una plenitud y una profundidad que me había experimentado hace mucho, pero que mucho tiempo. Quizás soñaba con mis planes para este año. 3:35 a.m. La tierra se sacude la mayor de las furias, parece que todo se viene al suelo, absolutamente todo. Al otro día la ciencia le pone cifra al sacudon: 8,8 grados; 900 veces fuerza que en Haití. Ciudades arrasadas, la gente loca saqueando las tiendas y sembrando más pánico y terror que el mismo terremoto , miles de familias cercenadas por un maremoto que no se anuncio. Los más afectados aún lloran y buscan en las costas los cuerpos de sus seres queridos, otros lo perdierón todo. Para quienes el terremoto solo significo un sacudon y un susto de muerte aún sufren de insomnio y los nervios no los dejan en paz ante el más minímo remesón.
Sin duda alguna es un 2010 que ha comenzado poniendola difícil, pero aquí estoy, dispuesto hasta a revivir este rincón del averno. Porque cuando vez que ante la miníma oportunidad, la masa se lanza a robar, saquear e imponer la ley del más fuerte en menos de 24 horas, aprendes que un país que se sacudira como el infierno cada 25 años, la educación y la cultura han de ser las piedras angulares de una sociedad que estara reconstruyendo sus casas, sus escuelas, sus cimientos cada 25 años.

Asi es que SEP7IMOCIRCULO ¡reinicia sus transmisiones! Con más cine, más literatura y más cómics.

sábado, 6 de marzo de 2010

Energía Atómica

Hace rato que esta en la web, pero como este rincón del averno estaba dormido, simplemente se nos paso. Pero como nunca es tarde, aquí esta el link para que puedan disfrutar del primer webcomic de Atómica. Que no saben nada sobre Atómica. Pues les cuento que es el proyecto editorial-comiquero-superheroico más interesante (incluso más interesante que varias novelas gráficas que verán la luz a futuro) que ha dado esta larga, estrecha y terremoteada franja de tierra. Y no es de extrañar si el proyecto salio de la cabeza de Sergio Amira, quien como se puede ver en cualquier pin up de Atómica juega limpiamente exponiendo siempre sus influencias y homenajes, que son muchos pues el sombrero de mago de Amira, cualquiera que haya leido su calabozo del androide lo sabe, es más profundo y rico en prestidigitaciones que el de muchos reputados guionistas del país del norte, asi es que nada de comparaciones majaderas que Atómica se defiende sola.

El webcomic en cuestión se titula Got the time (la referencia a cierta canción esta mas que explicitada en el cómic), y en él presenciamos como unas vacaciones familiares se convierten en tragedia (¿jugando a predecir el futuro reciente?). Nelson Daniel es quien esta a cargo de los lápices y demuestra solvencia narrativa, en fin que esta gratis (legalmente) en la web y leer no cuesta nada.

Link a un posto con links con info sobre Atómica

martes, 2 de marzo de 2010

TERREMOTO

La playa en Pelluhue después del terremoto

El viernes pasado volvi de mis vacaciones del sur, con las pilas cargadas al máximo, con los conflictos y problemas personales en vías de ser totalmente resueltos. Santiago se me presentaba como la tierra de las posibilidades a la que me enfrentaria de nuevo con toda mi fuerza y astucia; una ciudad que amo y odio, que me seduce y a veces me hace temer y odiar. Esa noche me quede dormido muy profundamente, como hace siglos que no lo hacía, sin saber que tres horas y media después de cerrar los ojos, un terremoto me botaria de la cama.

Desde mi más tierna niñez recuerdo que siempre me hablaban del famoso terremoto del 85 (naci el 86). La gente lo evocaba con cierto orgullo, como si en su cabeza experimentaran reminiscencias del momento. Lo sé por en sus rostros siempre se dibujaba una placida calma, la calma de alguien que esta satisfecho, de alguien que guiado por el recuerdo volvia a sentirse orgullosos de no haber sentido miedo. Y es que esa era la impresión que dejaban en mí, que nadie tuvo miedo. Pero habia una segunda impresión subyacente; evocaban el suceso como si este nunca fuera a repetirse de nuevo. Por más que todos se preguntarán tras la evocación: "¿cuando será el próximo?" todos lo hacían con la misma tranquilidad de un cientifico que anuncia cuando se extinguira el sol; sabe que será en tres mil años, que no estara vivo y esa sensación de saber que no estaras en el último tren se nota en su tono de voz.

El viernes pasado experimente "mi primer terremoto", asi de tierno y es que si vives en Chile te tocara sentir la tierra moverse con furia unas dos o tres veces en la vida, a menos que los caminos de aquello que algunos llaman destino te tengan en Madrid, o por lo menos en el extremo de Chile donde se supone no esta temblando. El asunto es que la experiencia duro casi tres minutos y bueno, no sentí miedo. Mi casa es bastante sólida y vivir a mas de cien kilometros de la costa, hace que ni por un segundo pienses en una ola maciza, de diez metros que entrara por tu puerta y se lo llevara todo, tus espacio, tu oxigeno, tus movimientos. Sin duda alguna ambos factores son claves para darle a alguien la autoridad de decir "no tuve miedo". ¿Y entonces que mierda se siente? se preguntara más de alguno. Y para ser justos he de decir que las emociones que se apoderan del cuerpo impotente, del cuerpo sacudido por la tierra, a tal punto que no puedes ni caminar, como si la venganza comenzará con devolverte a un estado antediluviano, son emociones que están un poco más allá del miedo. Por poco más de dos minutos sientes que todo se acabo, que el libro que es cada vida se salto trescientas páginas para llegar a las del final, no al último capítulo, sino a las que están en blanco, las que ya no son parte de la novela sino que están ahí, blancamente impolutas por lo azares de la edición. Por poco más de dos minutos sientes que absolutamente todo se vendrá abajo y la oscuridad se convierte en tu cabeza en una blancura que todo lo devora. Afortunadamente si vives en Chile sabes que la tierra no temblará eternamente, muy por el contrario, sabes que solo le bastan dos minutos para ponerlo todo por el suelo. Solo nos queda resignarnos y asumir la inmovilidad absoluta y aguantar la respiración para sobrevivir al minuto eterno.

El terremoto ocurrió el viernes 26 de enero, el lunes 1 de marzo todo el mundo vuelve a la máquina, a la capital, Santiago, locus grisaceo donde habita casi la mitad de Chile. Mucha gente pudo haber retornado ese viernes fatal, con la ilusión de no tener que invertir tres o cuatro horas de vida haciendo la fila de una plaza de peaje, un sábado o un domingo, de dicho fin de semana, en el que el grueso de la población retornaria, a sus hogares, trabajos, colegios, etc. Es en lo que piensas una vez que tras el terremoto vez la tele y/o escuchas la radio y te enteras que localidades y ciudades completas han desapa
recido, lugares con playas y costas llenos de gente por estos tiempos, comienzas a desear que ojalá muchos hayan decidido volver aquel viernes. Hasta que te ocurre lo que a muchos les debio pasar: observas atónito por la pantalla como el aquella playa donde estuviste pasandola tan bien hace unas pocas horas se convirtio en una espesa maza donde pululan trozos de casas, autos, barcos y cadáveres. El sentimiento es intraducible, en lo personal, hace exactamente una semana, siete días antes del terremoto estuve en una playa del sur donde experimente variadas formas de felicidad y plenitud que trate comprimir en imagenes capturadas por una cámara digital. Como dijo el ciego más sabio: "A la realidad le gustan las simetrias y los leves anacronismos".